martes, 5 de mayo de 2020

Rotación

Me estaba costando entender nuestro movimiento en relación con el sol. O sea, de boca para afuera, de memoria, se dice fácil (rotamos de "dos" modos frente a él: en rotación sobre nosotros mismos -24 horas- y, en traslación alrededor de este -365 días aproximadamente-). Sin embargo, entender desde nuestra propia experiencia este movimiento es otra cosa, pues estamos influidos por nuestros hábitos. O sea influye fuertemente en nosotros la forma en que cotidianamente observamos este fenómeno que es: el sol "sale" por el este y "se oculta" por el oeste. 



Para tratar de entender nuestro movimiento real alrededor de este astro, se me ocurrió ayudarme de dos herramientas (muy rudimentarias, por cierto!): la primera, fue hacerme una superficie (la cartulina con el pin) que muestre los puntos cardinales desde los cuales veo "salir" y "ocultarse" al sol (o la luna). Lo segundo, fue hacerme un modelo sencillo que muestre este movimiento a la manera en que lo veo habitualmente (la cartulina con el sol desplazable). El modelo en acción aquí.

Una vez que hice estas dos herramientas y las tuve a la mano me volví a situar en el lugar en que suelo observar estas cosas. Con la herramienta de puntos cardinales pude confirmar el lugar desde donde observo por dónde "sale" y por dónde se "oculta" el sol (o la luna). Con la otra cartulina, la que tiene al sol que se desplaza, pude reconstruir el modo en que veo este fenómeno.

Ahora bien, una de las cosas que me llamaba la atención y que fue el motivo por el que creé estas herramientas fue que se suele mostrar a nuestro planeta rotando sobre sí mismo frente al sol (el movimiento de rotación), y sin embargo, por alguna razón, no veo al sol (ni la luna) moverse de ese modo frente a nosotros, sino, sobre nosotros. Es una tara mental curiosa, pero era parte de mí. Al hacer el modelito pude darme cuenta de que no hay un problema con que el sol y la luna hagan el mismo movimiento no frente a mi sino sobre mi y que eso no le quite a ello la condición de "este" o de "oeste" que habitualmente tengo. Sigue siendo un movimiento que contiene este y oeste. Por qué eso ocurre sobre mí y no frente a mí  o sea, desde mi línea de visión normal, es una pregunta que corresponde a la fuerza de gravedad. Pero eso sería motivo de otro modelo. 

La segunda cosa fue que pude hacer con esta herramienta fue suspender esa imagen habitual de que son el sol o la luna los que se mueven frente a nosotros y entender, ahora desde la visión del modelo, que somos nosotros los que rotamos en dirección al "este" y que en este movimiento vemos al sol "salir" por ahí y luego ponerse por el oeste. Con la luna es algo similar, sino que esta tiene sus propias particularidades que espero en otro momento explorar (para así entender visualmente el tema de sus "fases"). 

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