domingo, 5 de mayo de 2019

La necesidad de creer

He llegado a la conclusión de que sí necesito expresar algunos de los referentes en mi vida: personas y proyectos de mi tierra, o de otros lugares, en los cuales pueda creer (para orientarme) o de los que me interese saber más desde la postura de alguien que los mira con una curiosidad atenta. Creo que esto tendré que decirlo en varias "entregas".

Religión: Catolicismo. Es aún mi religión fuente. La entiendo, eso sí, como un mundo referencial. Eso quiere decir que no participo de una perspectiva centrada en fidelidades vanas. Lo que debe ser cuestionado debe ser cuestionado, lo que debe cambiar debe cambiar y, aquello que encuentro como rico en contenido, es materia de acercamiento y práctica para mí. Desde esta perspectiva experimento que me es posible continuar en mi práctica/experiencia religiosa y entrar a dialogar y conocer otras religiones, creencias o perspectivas agnósticas.

Participar de una práctica religiosa definida me permite, por decirlo de alguna manera, experimentar contornos éticos  (modos de proceder y mirar el mundo) y percibir sus diferencias cuando me encuentro con otros. También y, sobre todo, me permite tener una perspectiva "base" del mundo. Me gusta sentirme parte de un mundo con sentido (creo que es algo muy bueno creerme hijo del creador del universo, hermano de mis conciudadanos y garante asombrado de la vida en la tierra). Y, sin embargo, me siento parte de mi generación y experimento que lo religioso, para mí, vuelve a ser lo que se supone que es: una adhesión personal, una respuesta tentativa a preguntas como: ¿cuál es mi lugar? ¿qué puedo esperar?

Respecto a posturas internas sobre temas controversiales. Creo que soy parte de los católicos que sabe y tiene presente que respecto a sus creencias lo que tiene "es" fe (un acercamiento que asiente y espera sin ninguna garantía futura) y no certeza. Por otro lado, me siento suficientemente adulto y formado como para  no sentirme intimidado por los mandatos u opiniones de autoridades por el simple hecho de venir de ellas (lo cual parece ser la vivencia general del católico común cuando se trata de temas de opinión). Que tenga esa postura respecto a pronunciamientos de autoridad en temas controversiales no quiere decir que no me pueda sentir cuestionado por la postura que estas pretenden defender y que sugieren como  la correcta; pero sí lo considero distinto del asentimiento banal y "fiel" que considero un hábito local tosudamente arraigado (que trasciende al fenómeno religioso). Me pueden sumar a la idea de Iglesia entendida como comunidad de fieles que caminan de la mano de un Espíritu Santo que la renueva y guía a través de los tiempos.

En política. Me siento perdido, la verdad. Si entiendo política como el interés por la cosa pública me siento identificado. Pero ¿qué es lo público en un sentido tangible?, lo descubro como mi relación y experiencia directa de ciertas instituciones. ¿Cuándo me siento en relación directa? Cuando puedo dirigirme a ellas para comentar, proponer o reclamar por alguno de los servicios que prestan. También cuando siento que doy voz, detecto o participo de una conversación pública sobre ellas.

Más allá de lo dicho me siento superado. Puedo estar enterado de los temas de política internacional o local y sentir inclinación hacia uno u otro asunto pero no me puedo "adherir" a ninguno de la manera en que me siento impelido por el medio en el que vivo. Lo político me genera la sensación de entrar a un mundo al que no le termino de hallar forma y, ante el cual, sin embargo, me veo lanzado y expuesto a nivel de la necesidad de opinar y decidir sobre temas y personas. Dado que eso es inevitable me es materia de reflexión. Sin embargo, creo que me siento bastante más tranquilo que el ciudadano común ante los temas de opinión candentes porque siento que tengo compromisos y acciones concretas en relación con la vida de mi país o los problemas del mundo.

Debido a que toqué el tema religioso creo que debo terminar mencionando que, respecto a temas vinculados con ciencia no encuentro obstáculos para experimentar los temas de fe y que, más bien, como parte de esta generación, me siento un entusiasta de los temas de ciencia y la exploración en todo sentido.